
domingo, 28 de diciembre de 2008
Vacatio: "Tiempo de vaciamiento"

miércoles, 17 de diciembre de 2008
Los cuerpos hablan sin palabras....














miércoles, 10 de diciembre de 2008
Mis primeros deseos para fin de año...

"Creo que conocerse a sí mismo es lo más importante que un ser humano puede hacer en su favor. Pero, ¿cómo puede una persona conocerse a sí misma? Aprendiendo a actuar, no como debería hacerlo, sino como en realidad lo hace. Tenemos grandes dificultades para diferenciar entre lo que hacemos como deberíamos y lo que queremos hacer con nosotros mismos.El problema es que nos esforzamos por obrar correctamente, como se debe a costa de ahogar, por propia y libre determinación, nuestra individualidad. Finalmente no sabemos lo que queremos, hasta el punto de creer que lo que estamos haciendo es realmente lo que queremos hacer. Una solución obvia consiste en preocuparnos menos por lo que hacemos que por el modo como lo hacemos. Ese "como" es el sello de nuestra individualidad; es una indagación sobre el proceso de actuar. Si prestamos atención a nuestro modo de hacer las cosas, tal vez descubramos maneras alternativas de llevarlas a cabo; es decir, tal vez tengamos la posibilidad de elegir. ..."
La dificultad de ver lo obvio. Moshe Feldenkrais. Editorial Paidos.
Este párrafo que les ofrezco habla de la "autoconciencia para el movimiento" una técnica para conocer sobre el movimiento de nuestro propio cuerpo, pero no en forma colectiva sino individual. Aprender a observarse para encontrar el "como" hacerlo de la mejor manera para uno.Como siempre mi obsesión por llevar los temas del movimiento a los de la vida, me detuve a observar que si este párrafo lo leyera cualquiera de ustedes, sin saber que es una técnica de movimiento, no se darían cuenta en lo más mínimo, o me equivoco?En estos tiempos de fin de año, en que nos imponemos muchas mas obligaciones (que en el resto del año, increíblemente) porque hay que dejar todo listo para salir de vacaciones, porque hay que terminar como sea lo que no hice en el resto del año para no dejarlo inconcluso, porque tenemos que ver con quien paso la navidad o el año nuevo ( no importa "como", sino "con quien") para que nadie se ofenda, etc...Entonces se me ocurrió volver a releer este libro y concentrarme en los "como" hacer este último trayecto.Personalmente me interesé en conocerme a mi misma desde hace un tiempo largo, desde diferentes lugares, y encontré alternativas de elección. Por lo cual cuido mucho mi individualidad, trato de priorizar los "como" y me cuido mucho de saber "con quien".Pero entiendo que es difícil, muy difícil no sucumbir a los "debe ser de esta manera".Por eso lo primero que se me ocurre desearles en estos tiempos de cierre del año, es que puedan "ver, sentir, desear, realizar" lo que realmente quieran desde su propia individualidad. Desde saber que realmente quieren hacer las cosas de determinada manera.Intenten utilizar la autoobservación, realmente encuentrense con ustedes mismos, deténganse cuando vean que están obrando por hábito y no por deseo real. Deténganse y tómense el tiempo para evaluar si es en realidad lo que quieren hacer y de la manera que lo están haciendo.Puede sonar raro, pero si lo intentan descubrirán que no siempre están actuando como quieren, sino como deben.Estos son mis primeros deseos.Démosnos la posibilidad de elegir, busquemos otras alternativas, no nos quedemos en la dificultad de ver lo obvio...
martes, 2 de diciembre de 2008
Esta bailarina que les presenté hace unas entradas, se puso a bailar al aire libre, en medio de la naturaleza. Aire, tierra, agua y fuego, esos son los elementos de la naturaleza que ella sabe aunar en su danza. Lo único que no se ve como tal es el fuego, pero saben donde está: en su alma, en sus músculos. Ella lleva dentro el fuego sagrado de la danza.
Cuando me siento agobiada, me gusta ver a alguien bailar, así desde dentro hacia afuera, llevada por el aire, suspendida en el, etérea, volátil. Fundida con la tierra solo con la planta de los pies. Tierra que apenas toca, a veces roza, a veces solo apoya para el impulso justo. Mecida por el agua en su interior que juega con el fuego. Allí adentro suyo nadie es mas poderoso, los elementos de la tierra conviven, se sostienen, se complementan. Cada uno en su lugar hace su trabajo, no hay poderes contrapuestos.
Como los que uno siente en el día a día. Cuando siente que las fuerzas flaquean, que falta poco, pero no llegamos. Que hasta las cosas placenteras agotan...
Por eso escucho la música, miro su danza, me transporto en su volar con el aire y vuelvo a empezar. Tomo energías de los elementos, no es fácil , pero tampoco imposible.
La tierra me sostiene, si dejo mi peso sobre ella...
El aire me eleva, me hace mas liviana, me llena y purifica... Si dejo que entre y salga de mi...
El agua me nutre, me alimenta, me limpia a veces en forma de lágrimas... si dejo que transite por mi cuerpo libremente...
El fuego me da la energía necesaria para crepitar, accionar, expandir su calor hacia el afuera... si lo mantengo vivo en mis entrañas...